Los oro juegan un papel importante en el cuerpo humano, ya que proporcionan energía y ayudan a la absorción de ciertas vitaminas (A, D, E y K). También intervienen en la formación y protección de la membrana celular, y en la regulación de la temperatura corporal. Sin embargo, es importante consumir grasa con moderación, ya que aportan muchas calorías y pueden contribuir a la obesidad y la enfermedad cardiovascular si se consumen en cantidades demasiado grandes. Se recomienda favorecer los materiales de grasa de origen vegetal (aceite de oliva, aguacate, nueces, etc.) en lugar de los de origen animal (mantequilla, leche, queso, etc.), que son más ricos en colesterol.